Tratamiento del Glaucoma

¿Qué es el Glaucoma?

El glaucoma es una patología crónica neurodegenerativa del nervio óptico. Se le conoce como la “ceguera silenciosa”.

El factor común en todos los tipos de glaucoma es el daño que se produce en el nervio óptico. Suele estar relacionado con una presión intraocular elevada.

El tratamiento que prescriba el oftalmólogo para conseguir que el paciente conserve la visión (no para curar), dependerá de cada persona.

Tratamientos del Glaucoma

En el Centro Oftalmológico Daniel Perera te tratamos el glaucoma e intentamos que conserves el mayor porcentaje posible de tu visión.

Existen los siguientes tratamientos.

Colirios

Este suele ser el principal tratamiento para casi todos los tipos de glaucoma en adultos.

Los colirios disminuyen la presión intraocular, de dos formas: favoreciendo el drenaje del humor acuoso o disminuyendo la producción de este.

Pueden ser aplicados desde una, dos o tres veces al día, dependiendo de cada caso. Si el oculista lo estima oportuno también pueden administrarse en comprimidos.

Láser

Se puede emplear como tratamiento en cualquier glaucoma o como preventivo del glaucoma agudo.

Es un método muy seguro. Existen tres modalidades de láser: la iridotomía láser, de carácter preventivo; la trabeculoplastia láser, para tratar glaucomas de ángulo abierto, y la cilclofotocoagulación transescleral diodo, centrado en los productores de humor acuoso.

Intervención quirúrgica

Se realiza en caso de que el tratamiento farmacológico o el láser no sea suficiente para controlar la progresión del glaucoma, o el paciente no tolere los efectos de los fármacos.

Existen dos técnicas más comunes: la trabeculectomía y la esclerotomía no perforante. Su objetivo es favorecer la filtración del humor acuoso.

Lo más importante es la prevención

Esta enfermedad es crónica y precisa de revisiones constantes y cumplir con el tratamiento que te sea recomendando, pues es fundamental para poder controlar el glaucoma.

No olvides que si eres mayor de 40 años es conveniente que nos pidas una consulta para que te realicemos una revisión. Al ser una enfermedad asintomática en muchas ocasiones, un diagnóstico precoz es primordial para evitar la posible ceguera.